Para obtener nuestro Aceite de Oliva Virgen Extra seguimos una serie de pasos esenciales y escogidos profesionalmente para garantizar la calidad, la pureza y el sabor tan único de nuestro producto final.
Descubre en qué consiste el proceso de elaboración de nuestro Aceite de Oliva Virgen Extra.

Aceite de oliva
La recepción, limpieza y pesado de la aceituna

La recepción de aceituna en nuestra almazara pasa por un proceso de selección de las olivas según dos clasificaciones, las de vuelo y las de suelo, que se difieren entre sí en cuanto a su calidad. Correspondientemente, cuando llegan a la almazara son separadas según estas dos clasificaciones para evitar una posible alteración de la pureza del aceite.
Con el mismo motivo, antes de pasar a la tolva de espera-molino, donde no permanece más de 24 horas, se deshace de otras impurezas como, por ejemplo, restos de hojas. Aparte de eso, una vez que hayan sido limpiadas y lavadas para eliminar las últimas adheridas del fruto, las aceitunas pasan a ser pesados.

La molienda y el batido

El proceso de elaboración continua con la aceituna siendo triturada por un potente molino de martillos que se encarga de convertirla en una pasta que posteriormente pasaremos a la batidora donde durante aproximadamente una hora a temperatura no superior a 27ºC está batiéndose. Este proceso sirve para la extracción del aceite de las células de la aceituna y se realiza en frío para que el aceite pueda conservar todas sus propiedades intactas.

El centrifugado

A continuación, la pasta pasa a la centrifuga horizontal, cuya función es separar el aceite de la pasta mediante la fuerza centrifuga. Para conseguir separar los líquidos de los solidos (alpeorujo), en este proceso se emplea una alta velocidad de rotación.

Elaboración
Decantación y almacenaje

Una vez extraído el aceite lo mandamos a unos decantadores para que de manera natural decante. Además, extraigamos las impurezas que todavía puede llevar, pero que en este estado del proceso ya no consisten en nada más que micropartículas como restos de piel o pulpa. De ahí lo pasamos a nuestra bodega climatizada e inertizada.

El filtrado, envasado y envío

El siguiente paso es el filtrado ya dependiendo si el aceite lo vamos a envasar como aceite filtrado o sin filtrar. Mediante el filtrado, se obtiene un aspecto más limpio y brillante del aceite. Correspondientemente, el aceite que vendemos sin filtrar parece más turbio, pero a cambio convence con su sabor especialmente intensivo.
Por último, pasamos a la planta de envasado donde realizamos el embotellado en los diferentes formatos que ofrecemos a nuestros clientes y etiquetamos las botellas según las características del aceite contenido.
Enviamos nuestro aceite a cualquier parte de España y Europa.